La Navidad llega envuelta en destellos, texturas ricas y una atmósfera que invita a celebrar. Entre cenas, encuentros especiales y eventos señalados, el estilismo marca el primer paso, pero es el maquillaje el que termina de definir el conjunto. Esta temporada, Gosh Copenhagen propone una guía práctica para interpretar las principales tendencias navideñas desde una mirada ‘beauty’ actual, sofisticada y fácilmente adaptable al trabajo profesional.
Los acabados metalizados más delicados se imponen esta Navidad. Reflejos suaves, tonos perlados y destellos ligeros aportan luminosidad sin exceso, acompañando el brillo del tejido sin eclipsarlo.
El maquillaje actúa como un velo de luz que unifica la piel y realza los rasgos con naturalidad, creando un resultado etéreo y luminoso.
Productos clave
Los estampados clásicos se reinterpretan desde una mirada actual, donde el equilibrio entre tradición y modernidad marca la diferencia. El maquillaje introduce orden y contraste, reforzando la estructura del estampado y aportando definición al rostro.
Se trata de un ‘look’ equilibrado, con carácter, pensado para acompañar estilismos con personalidad.
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El tailoring se consolida como símbolo de sofisticación contemporánea. Líneas rectas, siluetas marcadas y una estética impecable encuentran su reflejo en un maquillaje trabajado desde la exactitud y el control.
La belleza refuerza la limpieza visual del conjunto mediante acabados pulidos y bien definidos.
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Los tonos joya y las texturas profundas convierten el terciopelo en uno de los grandes aliados de las noches festivas. El maquillaje adopta una estética envolvente, jugando con acabados mates y matices cálidos que refuerzan la riqueza del tejido.
Un ‘look’ intenso, pensado para ocasiones especiales, donde el maquillaje se convierte en protagonista.
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