La terapia de lifting facial que combina siete técnicas y 266 movimientos en una misma sesión

Yvette Pons, facialista con más de treinta años de experiencia, ha vuelto a revolucionarlo con su innovadora terapia de lifting facial: YV-LYFTH. Este tratamiento, que combina siete técnicas diferentes en una única sesión de sesenta minutos, se ha posicionado como uno de los más completos y efectivos del mercado. Su propósito principal es abordar tanto el eje corporal como los signos del envejecimiento facial, logrando resultados visibles desde la primera sesión.

Yvette Pons, fundadora del Institut Sublim, ha sido galardonada en varias ocasiones por su dedicación y su enfoque innovador en el tratamiento facial, consolidándose como una referente en el sector. Su nuevo método, YV-LYFTH, es la culminación de años de investigación y experiencia práctica, con un enfoque totalmente natural que no requiere intervenciones invasivas.

1. Técnica de alineamiento sacro-vertebral: estabilizar el eje corporal es la clave de esta técnica que radica en estabilizar el sacro, la base de la columna vertebral, para mejorar la postura y preparar el cuerpo para el tratamiento facial. Según Yvette, muchos de los cambios músculo-esqueléticos faciales comienzan por una pérdida de la postura, lo que convierte a esta técnica en un paso fundamental.

2. Técnica de apertura diafragmática: liberar el sistema respiratorio a través del diafragma desempeña un papel crucial en la postura y el bienestar emocional. Esta técnica mejora la capacidad de movimiento del diafragma, lo que a su vez estabiliza las vértebras dorsales y lumbares, mejorando la alineación del eje cervical. Beneficia directamente la estructura del cuello y la mandíbula, dos áreas clave en los signos del envejecimiento.

3. Técnica de linfo aperturas: desintoxicar el cuerpo una vez que se ha trabajado la postura es indispensable para abrir los puntos linfáticos del rostro y el cuello, facilitando la eliminación de toxinas acumuladas. Esta técnica es esencial para mejorar la microcirculación y preparar la piel para las siguientes etapas del tratamiento.

4. Técnica de liberación del cuello y despegue epicraneal: aliviar tensiones es el objetivo de esta fase, en donde se trabaja sobre los músculos occipitales, frontales y temporales, favoreciendo la oxigenación y la circulación del líquido cefalorraquídeo. Esto mejora la elasticidad de los músculos faciales y del cuello, ralentizando el envejecimiento.

5. Técnica de vibración destensante: el objetivo de esta técnica es relajar toda la musculatura, preparando el rostro para la técnica siguiente. Los estiramientos en el cuero cabelludo también contribuyen a la liberación de tensiones acumuladas.

6. Técnica del pianista: estimular y descongestionar es la base de esta etapa del proceso, en donde Yvette se inspira en los movimientos rápidos y precisos de un pianista. Se trata de una técnica que estimula la circulación sanguínea y reaviva los neurotransmisores que mejoran la firmeza muscular. Además, ayuda a eliminar sustancias que contribuyen a la flacidez y el envejecimiento.

7. Técnica de planchado y oseopresión: estabilizar y estirar es la misión de la última técnica capaz de ayudar a readaptar la piel a la musculatura tratada y a prevenir el desgaste óseo, un factor clave en el envejecimiento facial. A medida que los huesos pierden volumen y soporte, los músculos y la piel tienden a caer, lo que provoca la aparición de arrugas y flacidez.

Yvette Pons, facialista y fundadora del Institut Sublim.

Los resultados de YV-LYFTH son inmediatos y acumulativos. Tras una sesión de sesenta minutos, los clientes notan una mejora visible en la elasticidad y firmeza de su piel. Yvette Pons recomienda una sesión de mantenimiento cada cuatro semanas para conservar los beneficios del tratamiento y un protocolo de cuatro sesiones anuales, con una frecuencia de dos sesiones semanales.

YV-LYFTH es una terapia de sesenta minutos con siete técnicas donde se mezclan en sinergia las mejores manualidades de autor, basadas en los E.D.E.D.E.D (Estabilizar, Desintoxicar, Estimular, Despegar, Estirar y Destensar). Estos son los seis pilares que ha creado, fundamentales e indiscutibles, para conseguir la normotonía y tratar sin excepción todos los puntos que pueden intervenir en los signos de la vejez